domingo, 24 de septiembre de 2017

ENCEFALOPATÍA TRAUMÁTICA CRÓNICA

La prensa recoge estos días la noticia de que el jugador americano Aaron Hernández que fue encontrado muerto en su celda penitenciaria el día 19-04-17 sufría de una forma grave de encefalopatía traumática crónica.
La encefalopatía crónica traumática se conocedesde hace unos 50 años como demencia pugilística y es una enfermedad neurodegenerativa, que se produce principalmente por la presencia de lesiones cerebrales traumáticas repetitivas con o sin síntomas, incluyendo lesiones concusivas y sub-concusivas.
Actualmente se ha documentado en atletas que realizan deportes de contacto, cómo boxeo y futbol americano, pero también puede afectar a víctimas de una explosión que sufren los efectos de una onda expansiva. Tras la negativa mantenida durante muchos años por diferentes federaciones deportivas americanas (que temían cuantiosas demandas por parte de deportistas de élite afectados por esta dolencia), la enfermedad fue finalmente reconocida gracias a los trabajos de investigación realizadas por el Dr Bennet Omalu (patólogo forense y psiquiatra de origen africano) que trabajó en el caso del jugador de futbol americano Mike Webster quien había muerto de forma inesperada después de años de lucha contra un deterioro cognitivo, abuso de drogas, depresión e intento de suicidio. Ante la presión de las poderosas ligas americanas, el Dr. Bennet Omalu pagó personalmente los análisis patológiocos del cerebro de Webster en los que pudo observar la gran atrofia cerebral y daño neuronal producidos por los golpes acumulados durante años de vida deportiva. Este apasionante capítulo de la historia de la medicina forense se encuentra representado en la película La verdad duele protagonizada por Will Smith como Bennet Omalu). En el año 2005, junto con sus colegas del Departamento de Patología de la Universidad de Pittsburgh, Omalu publicó sus hallazgos en la revista Neurosurgery con el título de «Encefalopatía crónica traumática con un jugador de la NFL» siendo considerada esta publicación como la base definitiva para el reconocimiento de la enfermedad.

Hernández se encontraba cumpliendo cadena perpetua por un homicidio cometido años antes y el conocimiento ahora de que padecía una forma grave y avanzada de ETC ha llevado a su abogado reclamar una revisión de su causa penal y a solicitar una cuantiosa indemnización a la liga americana de futbol.